Presentación

La gravedad de la crisis política que atravesamos nos conduce a un modelo de democracia exclusivamente representativa de los intereses de un núcleo muy pequeño de población (el 1%) que posee el capital financiero. Esta modelo de democracia al que nos conducen es gestionada por un envoltorio de partidos y organizaciones que, acomodándose en todas las instituciones y ámbitos del estado, toma las decisiones en función de los intereses de ese 1% de la población y con el único objetivo de seguir manteniéndose en el poder.
El conglomerado de partidos y organizaciones está formado por la mayor parte de los partidos políticos más una burocracia mantenida en las organizaciones empresariales y sindicales.
En estos momentos se hace necesario avanzar hacia un modelo de Democracia Económica, Participativa y Social, que represente los intereses de la mayoría de la población. Que represente los intereses del 99% frente la los del 1% restante que actualmente está tomando las decisiones en su único beneficio. Hacen falta nuevos cauces de participación de los ciudadanos en la toma de decisiones relevantes para los intereses de la mayoría.
Avanzar hacia este objetivo, requerirá mejorar la coordinación de todos los movimientos sociales que reivindican una mayor representación y un protagonismo más directo en la defensa de sus intereses.
Organizar una Plataforma Electoral que pueda representar los intereses de la mayoría de la población es un objetivo inmediato y urgente.
Este blog, aunque gestionado de forma individual por Miguel Toro, aportará las ideas de núcleo de personas que están trabajando en esta dirección.

martes, 29 de abril de 2014

Declaración de la Asamblea Ciudadana de Sevilla ante las propuestas electorales para las elecciones europeas.

La crisis económica que ya lleva demasiados años continua. Nos dicen que ya estamos saliendo la crisis porque el PIB está creciendo lentamente. Pero la nueva situación a la que vamos, es una situación de paro generalizado, deterioro de los servicios públicos de forma progresiva y un aumento de la desigualdad sin precedentes. En la base del problema está la desregulación de los mercados internacionales por un gobierno europeo que no representa los intereses de la mayoría de los ciudadanos.

Nos está conduciendo, y hasta ahora no hemos sido capaces de impedirlo, a una democracia exclusivamente representativa de los intereses de un núcleo muy pequeño de población, que posee el capital financiero y que es el responsable de los sistemas especulativos y de fraude que han provocado la crisis, y que han conseguido imponer sus intereses en el diseño de las políticas europeas posteriores a la misma. Este modelo de democracia es gestionado por un envoltorio de partidos y organizaciones que, acomodándose en todas las instituciones y ámbitos del Estado, toma las decisiones en función de los intereses de ese pequeño núcleo de la población, con el único objetivo de seguir manteniéndose en el poder.

Este conglomerado está formado por la mayor parte de los partidos políticos, más una burocracia mantenida en las organizaciones empresariales y sindicales.

Cada vez es más necesario avanzar hacia un modelo de Democracia Política, Económica, Social y Participativa, que represente los intereses de la mayoría de la población. Una mayoría que necesita instrumentos públicos para poner en marcha políticas contra el paro, contra el deterioro de los servicios públicos, contra la corrupción, contra la evasión fiscal. Hace falta un gobierno que ponga en marcha la reforma fiscal progresiva necesaria, y oriente los objetivos del Banco Central Europeo hacia la lucha contra el paro y financiación de las políticas públicas necesarias.

Para conseguir esos cambios en las reglas del juego, hay que formar una mayoría electoral que busque esos objetivos. No existen razones para dejar este espacio electoral a unos partidos políticos que no nos representan después de haber obtenido nuestros votos, que sólo han pensado en sí mismos y en la representación de los intereses de una exigua minoría. Sabemos que es posible. Muchos miles de personas estamos obligados a ello, y en el peor de los casos intentarlo.

Para la mayoría electoral que buscamos, es necesaria una nueva forma de hacer política, donde los representantes electos asuman la profesionalización de la vida política con carácter temporal, por el periodo máximo para el que hayan sido nombrados y elegidos.

La Asamblea Ciudadana de Sevilla (ACS), a las alturas del mes de Noviembre pasado, tomó la decisión de poner en marcha las actividades necesarias para la creación de una Plataforma Electoral Ciudadana. Había las condiciones necesarias para ello. Sigue habiendo una demanda ciudadana de una nueva opción electoral, con capacidad para cambiar las cosas a nivel español y europeo. Se creó e impulsó la  Asamblea 14D como mecanismo de coordinación con otros grupos y plataformas del estado español en el objetivo de crear una Plataforma Electoral Ciudadana que se presentara a las elecciones europeas. Se han llevado a cabo todos los esfuerzos posibles para coordinar, para luchar contra la fragmentación de los movimientos sociales, para crear una alternativa electoral con capacidad para cambiar las cosas. No ha sido posible. Los líderes de las nuevas propuestas electorales no han estado a la altura que las circunstancias requerían. No ha habido la generosidad necesaria para construir una alternativa electoral que hace falta. Los líderes de las nuevas propuestas electorales han seguido repitiendo las maneras de hacer de la clase política instaurada en el poder. Sólo han buscado migajas que repartirse. Sólo han mirado en sus pequeños intereses electorales a corto plazo. Han desperdiciado una ocasión histórica. Están generando aún más confusión en la mayoría ciudadana y posiblemente una mayor abstención.

Pero sigue siendo necesaria una Plataforma Electoral con capacidad de cambio. Siguen siendo necesarios nuevos ciudadanos que lideren el cambio, nuevos “políticos” que sepan que su compromiso es de ida y vuelta, con la generosidad necesaria para construir la nueva alternativa electoral que hace falta. Nuevos políticos que se ofrezcan para reconstruir lo público, luchar contra la corrupción, que obligue a pagar impuestos a una minoría, que con la legislación actual, no lo hace, que limite el poder de los monopolios del sector eléctrico, etc.

La Asamblea Ciudadana de Sevilla (ACS), como se puede entender después de leer estas líneas, no va a apoyar como colectivo a ninguna de las opciones electorales que se presentan, pero recomienda participar activamente en este proceso electoral que tenemos delante, siendo coherentes con nuestra trayectoria en este año y pico de vida. Por lo que, vamos seguir trabajando en la construcción de la Plataforma necesaria para poder cambiar las cosas. Y para ello colaboraremos con la amplia mayoría ciudadana que demanda ese cambio de las reglas del juego.

Asamblea Ciudadana de Sevilla 26-04-2014