Todos lo que vivimos en este país conocemos la realidad política y social de lo que está pasando. Vemos como millones de personas la sufren, protestan y actúan contra las medidas antisociales y de condiciones de trabajo dirigidas contra la gran mayoría de la población. Pero la mayoría de los esfuerzos de protesta, indignación, resistencia y lucha, se articulan de forma independiente, sesgada y segmentada por centros de trabajo, sector, profesión, territorios, etc. La mayoría de las protestas están basadas en las medidas concretas y directas que más le afectan a cada uno. En muchos casos se esquiva, o no se plantea, la justificación y análisis de la crisis y sus consecuencias y por lo tanto la manera de encontrar una solución.
Para avanzar debemos plantearnos referentes políticos comunes que hagan posible que tanto esfuerzo disperso, encuentre cauce y camino real para un cambio de tendencia. Debemos conseguir que se legisle en defensa del mejor servicio público, conseguir trabajo para todos y mejores condiciones de vida en una sociedad democrática, justa e igualitaria. Después y con orden, iremos pagando las deudas que en justicia corresponda. Para que esto sea posible hay que conquistar la mayoría en las Instituciones a través de los procesos electorales.
Para conocer más a fondo la realidad de los movimientos sociales, respecto de lo que piensan sobre la participación ciudadana a través de una Plataforma Electoral, a finales de Julio y principios de Agosto nos hemos puesto en contacto, a nivel personal y como miembro de la ACS, con muchos movimientos ciudadanos que hemos podido encontrar en la red. A todos ellos nos dirigimos con una Carta de Presentación y un documento explicando la Necesidad de Coordinar los movimientos ciudadanos.
La impresión general es que muchos movimientos sociales son conscientes de la importancia de ganar las elecciones por parte de una mayoría social que pretenda cambiar la situación. Pero queda mucho trabajo por hacer. El problema en la mayoría de los casos, es que la idea está empezando a ser debatida. Hay que diseñar un camino que nos permita acercarnos poco a poco al objetivo.
La complejidad de la tarea es muy alta, por la diversidad de movimientos a coordinar, por la financiación que obtendrán los grandes partidos para su campaña, por el apoyo que previsiblemente les darán los medios de difusión. Pero tenemos una ventaja: las nuevas tecnologías nos pueden ser de gran ayuda.
En primer lugar debemos proponernos un objetivo inicial: constituir un único Portal en Internet que sea el punto de encuentro de todos los movimientos ciudadanos. Un portal que incluya a la mayoría de movimientos sociales y ciudadanos que tengan el cambio como objetivo. Este portal, su nombre, ubicación, mecanismo de gestión, recursos para financiarlo, etc., tiene que ser objetivo de acuerdo en una reunión del máximo número de movimientos ciudadanos a celebrar a primeros de otoño.
Todas estas reflexiones, propuestas de pasos concretos a dar os las proponemos en el documento Los Movimientos Sociales y las Elecciones.
